Por Arturo Arroyo.
Transcribo el tuit del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump de este jueves 30 de mayo: “El 10 de junio, los Estados Unidos impondrán un arancel del 5% a todos los bienes provenientes de México, hasta que todos los migrantes ilegales que vienen desde México PAREN.
La tarifa aumentará gradualmente hasta que se resuelva el problema de la inmigración ilegal”. Una vez más el presidente Trump amenaza a nuestro país, ahora con incrementar los aranceles argumentando que no se han tomado acciones efectivas para detener el flujo de migrantes a su país.
Los argumentos de Washington son en parte ciertos, ya que desde 2015 hasta noviembre de 2018, México informó haber detenido a casi 524,000 inmigrantes y solicitantes de asilo del Triángulo del Norte (Honduras, Guatemala y El Salvador). A medida que las políticas de asilo de los Estados Unidos se han endurecido, México también ha absorbido a más centroamericanos que necesitan protección humanitaria.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha estado hasta ahora dispuesto a albergar a algunos migrantes centroamericanos con destino a los Estados Unidos, pero instó al gobierno de los Estados Unidos a invertir en el sur de México y Centroamérica para evitar futuras migraciones no autorizadas, el problema es más complejo de lo que pensamos y el presidente Trump esta aprovechando este tema para utilizarla como bandera política para su reelección.
Las consecuencias para nuestro país serían muy graves, ya que tenemos una dependencia comercial que representa el 80% del total nuestras exportaciones con destino a Estados Unidos.
La imposición de un arancel del 5% y que podría llegar hasta el 25% a todos los bienes golpearía de manera catastrófica a la industria manufacturera y agropecuaria, pero los efectos en la economía serian multiples en especial para los mercados financieros y para la confianza de los inversionistas. Se avecina un viernes negro para el peso mexicano, el gobierno de México tendrá que negociar y pronto esta acción unilateral, de no hacerlo nos tendríamos que preparar para una guerra comercial como la que ya inició con China, aunque nosotros tendríamos mucho más que perder.
Ahora es cuando costará muy caro el haber subestimado los Acuerdos Comerciales firmados con tantos países por habernos enfocado en nuestro principal socio comercial. Esperemos que todo quede en una simple amenaza.
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